26 junio, 2008

Centro, mujeres, diálogo, futuro... ¿y vino?

Va desgranando el nuevo PP su esencias ideológicas en distintos encuentros, especialmente en medios afectos de nueva hornada como la SER. Ayer el mismísimo Rajoy fue víctima de lo que podríamos denominar una "felación radiofónica" por el otrora hostil Francino, en una entrevista tan almibarada que apostaría a que los colegas de la emisora prisaica estuvieron a punto de gritar "¡que se besen! ¡que se besen!", en plan boda gay.

Pues bien, como decía, Rajoy se proponía ilustrarnos sobre los tiempos que nos llegan y definió el "marianismo", nuevo espíritu que debe guíar a las hordas populares y que se explica en cuatro sencillas palabras: centro, mujéres, diálogo y futuro. Pensamiento profundo do los haya.

Hay que decir que no puedo estar más de acuerdo, sobre todo en el apartado "mujeres", en el que me parece evidente la influencia que ya está ejerciendo en el partido Javier Arenas, cuyo gusto por el bello sexo es de sobra conocido, al parecer incluso dentro del propio PP. No obstante, cabe preguntarse si con tan sólidos pilares puede construirse un edificio político de gran solidez y, sinceramente, no parece que desde tales cimas intelectuales se pueda llegar mucho más allá que a la vuelta de la esquina o a una juerguecita ideológica.

Haciendo un símil futbolístico, nada más apropiado hoy, podríamos hablar de aquellos equipos que salen a empatar los partidos y que suelen cosechar como resultado de su racanería notorias derrotas (excepto en el caso de los italianos y ya ni siquiera eso) en las que, a la vergüenza de haber perdido, hay que unir la de haber jugado como el culo, con perdón.

Y es que parece que en el PP, mientras deciden si cambiar o no su nombre por el de PCC (Partido Cordial y de Centro), se creen que la crisis económica va a meter todos los goles que ellos no están dispuestos a rematar, por molicie, falta de principios o porque, como decía Gomaespuma, el portero también tiene madre.

Mala memoria hay, si no recordarían como, con crisis, corrupción y tras once años en Moncloa Felipe todavía se la metió por la escuadra en el 93.

4 comentarios:

Miguel A. Pazos Fernández dijo...

Yo ya dije que se parecía a sexo, drogas y rock and roll.

Bruno Mancha dijo...

Para definiciones frívolas del centro-reformismo, me gustaba más aquello de las ideas claras, la sensatez, el sentido común, etc.

Anónimo dijo...

El PP se ha convertido en un Circo lleno de payasos llorones.

theguru dijo...

Los invito a recorrer mi blog, sobre informacion general, y cosas perdidas pero interesantes que he encontrado en la web.
mderman.blogspot.com

saludos!