Hola a todos. El Hotel Sheraton de El Cairo esta a unos 50 metros de la orilla del Nilo, así que desde aquí mismo, mientras escribo, puedo ver las aguas de uno de los ríos míticos de la historia de la humanidad.
Este es un país impresionante y desde muchos puntos de vista. En primer lugar su historia, por supuesto, y su arte, todavía más rico e impresionante de lo que uno se imagina desde la distancia. En estos cuatro días hemos visto construcciones, relieves o dibujos que por si solos le quitan a uno el aliento, pero que en rápida sucesión nos han dejado poco menos que patidifuso.
Para que se hagan una idea de lo que se siente aquí, hace menos de dos horas que tenia mi cara a medio metro de la de Ramsés II, un caballero que era el rey mas importante del mundo hace mas de 3.000 anos y cuya escalofriante momia se expone en el Museo de Arqueología, a unos pocos minutos de donde me encuentro sentado.
Además de todo eso, Egipto me esta resultando un país sumamente interesante, y que da la sensación de vivir un momento muy particular de su historia. A pesar del “cordón sanitario” que la infraestructura turística y el guía (otro día hablamos de los guías porque el temita es de los que dan de si), si uno se esfuerza se puede percibir la llamativa sociedad de tremendos contrastes y a mitad de un proceso de cambio que supongo que es común a otros países islámicos.
Mañana y pasado trataremos de patearnos El Cairo sin la “inestimable ayuda” de nuestro guía Ramadan (no es guasa, se llama así el jodío), así que espero que podamos tener una percepción mas clara de lo que se cuece por aquí.
Por supuesto, se lo contaremos.
Un saludo de su corresponsal en El Cairo.
04 mayo, 2004
A orillas del Nilo
Posted by Unknown at 6:37 p. m. Menéame
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