20 diciembre, 2004

Pérez, el genovés

Como recuerdo que le pasó a Franco Alemán hace algún tiempo hoy he escrito un comentario en bitácora ajena (un género en el que no me prodigo mucho) que una vez mandado he pensado que valía la pena desarrollar hasta convertir en un pequeño artículo.

El tema es la noticia que ha lanzado hoy la Cadena COPE y que parece ser que les ha costado que les tumben la web: resulta que las páginas Aznar.net y losgenoveses.com eran mantenidas por Julio Pérez Sanz, a la sazón asesor del Gabinete del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados. Por si esto no fuera suficiente parece ser que lo hacía desde su despacho…en el Congreso de los Diputados.

A estas horas la noticia no ha sido desmentida, pero lo que se empieza a notar por las covachuelas de Internet es que va a tratar de justificarse lo injustificable al grito de “es lo mismo que gruporisa.com a los que tanto defendíais”.

Pero resulta que no, que como diría ese chico bajito que canta no es lo mismo: que un particular haga una página en la que se mete con unos u otros políticos está básicamente bien, puede tener mejor o peor gusto pero está bien, para eso sirve la libertad de expresión y mientras no caiga en los delitos tipificados en el código penal nada que objetar.

Por contra, que un señor que es cargo de un partido político (y los partidos los pagamos entre todos, ojo) utilice un despacho oficial para desde el anonimato de Internet realizar mofa y befa (me encanta esa expresión) de sus oponentes es una vergüenza, y que las portavocías de la izquierda no se den cuenta de ello a la primera revela que se han dejado la ética olvidada encima del piano y que en cuanto alguien se mete con el PP son como los monos del zoo, que hacen lo que sea si les tiras cacahuetes.

Pues eso, no os perdáis tampoco la anotación de Pablo, que es como siempre sagaz y jugosa. Espero que no se empeñe en cobrarme royalties :-).

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