¡Ya tenemos himno!

Eso sí, es patético, como por otra parte todos nos imaginábamos que iba a ser:

¡Viva España!
Cantemos todos juntos
con distinta voz
y un solo corazón.

¡Viva España!
Desde los verdes valles
al inmenso mar,
un himno de hermandad.

Ama a la Patria
pues sabe abrazar,
bajo su cielo azul,
pueblos en libertad.

Gloria a los hijos
que a la Historia dan
justicia y grandeza
democracia y paz.

Cuando llevábamos siglos sin tener letra en el himno y no nos había pasado nada la operación para poner uno no podía acabar en otra cosa que en una patochada de buen rollito y que lo mismo podría servir para España que para Lugo, Nueva Zelanda o el club de remo de Calatayud, caso de existir.

Y es que, por supuesto, la letra no incluye ni una sóla referecia reconocible, ni a nuestra historia, ni a las distintas partes de España... ¡ni siquiera al Real Madrid y el Barça!

Pues eso, que entre lo tonta que era la idea y el estúpido método para llevarla a cabo (manda huevos que la elijan entre los liberticidas del COE y los de la SGAE) el resultado final es una memez que va a cosechar el más rotundo de los fracasos.

Pa eso que hubiesen elegido el de Dantés, que por lo menos tiene guasa: