Inimputable

1. adj. Der. Dicho de una persona: Eximida de responsabilidad penal por no poder comprender la ilicitud de un hecho punible o por actuar conforme a dicha comprensión.

La definición de la RAE del palabro inimputable es bastante clara, lo que yo me pregunto hoy es si puede aplicarse a un niño de 13 años que agarra a un compañero de colegio de 10, lo amenaza, lo sodomiza y le obliga a practicarle una felación. No, no es retórica, eso es exactamente lo que ha ocurrido en un pueblo de Almería.

Por si esto no fuera suficiente, hasta que hoy ha saltado la noticia a los medios la víctima tenía, si quería ir al colegio, que soportar que por allí estuviese su agresor, tan campante. Y es que como tiene menos de 14 años este hijo de satanás es inimputable, es decir, puede hacer lo que le venga en gana (es más, ya lo ha hecho), su único castigo ha sido ser expulsado "unos días" del colegio.

Es obvio que un niño de 13 años no tiene la misma responsabilidad que un adulto y, por tanto, no puede tener el mismo trato en cuestiones penales pero... ¿no hay ningún punto medio entre tener toda la responsabilidad y no tener ninguna? ¿No sabía ese crío que lo que estaba haciendo no estaba bien? Pues si tenía alguna duda ahora se la han aclarado: puesto que no tiene castigo no habrá hecho nada tan malo.

Por otra parte, tampoco creo que sea un disparate pensar que un crío que hace eso tiene un grave problema que, ya se llame enfermedad mental o simple y llana maldad, lo incapacita para llevar una vida normal rodeado de otros niños. Al menos, si yo fuera el padre de cualquiera de sus compañeros de colegio estaría seriamente preocupado, no digamos si fuese el de el pobre chico que ya ha sido víctima de ese salvaje.

Para completar el despropósito ha tenido que salir el tema en los periódicos para que obliguen al niño a cambiar de colegio, cosa que ha anunciado hoy la Junta de Andalucía. A estos grados de impunidad nos lleva el absurdo sistema legal del que nos hemos dotado: imposible hacer más por el delincuente y menos por la víctima.

Una de las cosas interesantes que propuso el PP en la pasada campaña fue cambiar un poco esta barbaridad y, por supuesto, le llovieron tortas por todos lados, como si defender a ese pobre niño violado fuese fascista, o comunista o socialdemócrata o de centro... vamos, como si la justicia y la compasión tuviesen color político.

Lo que no lo tiene es la estupidez.