El ciberpesao

Gracias a Olímpico Desprecio estoy teniendo el placer de disfrutar de uno de los "grandes placeres" que nos ofrecen internet en general y la cosa esta de los blogs en particular: la figura del "ciberpesao", que no es necesariamente lo que se conoce como un troll sino un ser de una especie diferente y, si bien es algo menos disruptivo, resulta al final casi igual de cargante.

El ciberpesao es un personaje que, adoptando una o varias personalidades distintas pero siempre refugiándose en el anonimato, se pasa la vida en blogs que detesta profundamente, pese a lo cual le dedica ímprobos esfuerzos y una cantidad de tiempo muy superior a la que puede invertir en el blog el propio autor.

No es que falte demasiado al respeto, no insulta (habitualmente), pero ahí está constantemente, dando la matraca, diciendo blanco si tu dices negro y negro si dices blanco. Tampoco es que molesten demasiado (hombre, algo sí que acaban cargando) y desde luego dan más páginas vistas que un robot, pero uno se pregunta sobre todo qué les mueve a visitar tanto un sitio que odian, por qué no te dejan en paz en tu enorme y monstruoso error y como es que ellos, en su inmensa sabiduría, no se dan cuenta de que no van convencerte y sacarte de tan equivocadas y a menudo malignas posiciones.

La siguiente afirmación es una apreciación completamente subjetiva, así que no me pidan datos, pero tengo la impresión de que los "ciberpesaos" campan más por páginas cuya orientación es liberal o conservadora que en páginas izquierdosas. Puede ser que se deba al ánimo combativo de los jóvenes izquierdistas, que al no tener grandes revoluciones sociales que hacer se conforman con darle la matraca al fascio (o a lo que ellos creen que es el fascio, que es todo lo que no sean ellos mismos), puede ser que simplemente sea el único sitio donde admiten sus rebuznos, pero soy de los que se niega a creer que estén pagados por una mano negra y pepiña de la red: ¿cómo alguien va a pagar por que molesten a alguien tan poco importante como yo?

Además, nosotros los liberales, conservadores, liberal-conservadores y demás ralea, como que somos más perezosos y no nos pasamos el día en el blog de Escolar (hijo) ni sucedáneos similares; hombre, digo yo que alguno habrá por esos lares, pero si comparamos el tamaño de aquel blog con el de otros como OD, la concentración de "ciberpesaos" en éste último es, desde luego, sorprendente.

Bueno, yo tampoco les voy a decir lo que tienen que hacer pero... que vidas tan tristes y, sobre todo, que forma pasarlo mal para nada. Por cierto, ya puestos a sufrir por lo menos podrían hacerlo en silencio...