Con la que está cayendo por Génova 13 en los últimos días casi se nos olvida (y a muchos se les habrá olvidado por completo, no crean) que seguimos en manos de un gobierno absolutamente incompetente y que las oficinas del INEM reciben cada día la visita de una auténtica riada de ciudadanos que tienen la desgracia de entrar a formar parte de esa triste lista.
Afortunadamente, Zapatero ha comparecido hoy en el Parlamento y nos ha recordado que no tiene otra idea que echar más y más dinero público en proyectos que no funcionan, ideas disparatadas y sin ningún plan de fondo más que ir sobreviviendo, a golpe de presentaciones y titulares de prensa, a las colecciones de malas noticias que nos depara cada semana.
También hemos podido ver hoy a una oposición que por fin hacía algo de lo que se le supone y espera, con un Rajoy vuelto de las tinieblas y que, al menos en su primer discurso (escribo antes de que lleguen los turnos de réplica), ha hecho una crítica muy severa al gobierno y ha reclamado sin ambigüedades algunas de las reformas que son más que necesarias, entre ellas, la espinosa y políticamente incorrecta reforma laboral, la no menos urgente energética y la de la educación, que tampoco es moco de pavo.
Todo en un marco en el que la administraciones ahorren dinero en lugar de derrocharlo y reduciendo el gasto público (buen momento, por cierto, cuando Rajoy ha recordado a Zapatero que su "novedosa" idea de reducir el gasto corriente en 1.500 millones la había aportado el PP en el debate presupuestario).
Desgraciadamente, los telediarios extractarán cortes de 15 o 30 segundos que no dirán nada, los periódicos harán resúmenes plúmbeos cuando no completamente parciales y pasado mañana o el jueves a más tardar Garzón el justiciero volverá a las portadas y se seguirá haciendo la labor de despiste y mareo que permite que un gobierno que se encuentra con la peor crisis en 40 ó 50 años y demuestra día a día que no sabe que hacer siga cómodamente instalado en el poder y sin demasiada preocupación por perderlo.
10 febrero, 2009
¡Casi se nos olvida!
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1 comentario:
Tenemos lo que nos merecemos. Me temo que Zapatero es buen ejemplo de lo que parece muy extendido en nuestra sociedad española... mucha irresponsabilidad, poca preparación e intentos bastante holgazanes de ser un "curra poco - cobra mucho". Ahora los votantes, que apechuguen con las consecuencias... aunque lo triste es que el cenutrismo lo estamos sufriendo todos, incluso los que hemos votado otras opciones. Pero es la democracia. Qué lástima, con el potencial que parecíamos tener como país. Como siempre... en el pozo.
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