Umbral “arregla” a Ibarretxe a tortas (dialécticas, claro)

Decir que Paco Umbral es uno de los mejores columnistas de España es como decir que el sol da calor o que por la noche hay poca luz: una obviedad, pero es que además de su habilidad habitual hay que decir qué últimamente está muy en forma: lírico, sagaz en el análisis y genial en el detalle.

Hoy, sin ir más lejos, hoy le sacude un artículo al Lehendakari de la mitad de los vascos que debe andar éste llorándole a la estatua de Sabino Arana, porque pocas veces he visto algo tan acertado y tan refinadamente cruel:

“Ibarretxe sólo queda bien como pariente pobre, con todo el perfume de la provincia, trajeado en Maxcali y hablando él solo, exponiendo a las butacas parlamentarias un programa de tortas, hostias y muertos, como preludio a la paz verde y fecunda que ya tienen los caseríos vascos. Ibarretxe, ya digo, sólo queda bien hablando mucho, recitando de rodillas el catecismo de Sabino Arana.”

Y es que por mucho plan que nos traiga no es otra cosa que un triste paleto de provincias, ¿qué otra cosa podría ser alguien del PNV?

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