14 julio, 2005

Mario Vargas Llosa en el II Foro Atlántico

Como Presidente de la Fundación Internacional para la Libertad, Mario Vargas Llosa fue el encargado de clausurar el II Foro Atlántico con un breve discurso, se suponía que de conclusiones, pero que el escritor peruano aprovechó para comentar algunas de sus preocupaciones sobre la política internacional que, como se había visto a lo largo de las diferentes conferencias y paneles, está francamente agitada.

Empezó Vargas Llosa padre comentando lo confuso que se encuentra el mundo de las ideologías en la actualidad, valió como excelente ejemplo el panorama que visto en el pasado referéndum sobre la Constitución Europea en Francia, en el que ambos bandos, los que pedían el SI y los que abogaban por el NO, razonaban su voto como “la única forma de frenar al liberalismo”. Así las cosas, según MVLl la única ideología que parece estar realmente activa es el nacionalismo, mientras que el liberalismo es considerado "la bestia negra, la fuente de todos los males"…

Uno de los puntos más interesantes de su breve charla fue la reflexión que Vargas Llosa hizo sobre Hispanoamérica, que fue realmente pesimista: “Veo el futuro de América Latina con mucha angustia, no sólo por los caudillos como Chávez sino por la inmensa frustración con los regímenes que ha ido minando la democracia. La corrupción, tanto o más que la labor desestabilizadora de Chávez, es lo que puede destruir la democracia en Latinoamérica”.

Como no podía ser de otra forma dadas las circunstancias, Vargas Llosa dedicó parte de sus reflexiones al terrorismo, Don Mario empezó por denigrar las explicaciones que relacionan al fenómeno terrorista con la pobreza o la injusticia global (y no vamos a señalar), para él la cosa es muy diferente: “La civilización que disfrutamos es una enemiga mortal de toda la intolerancia y la estupidez que representa el fanatismo, y quieren acabar con ella porque si no será la civilización la que acabe con ellos”.

Y como hoy en día es francamente complicado hablar de terrorismo sin mencionar lo que ocurre en Irak, Vargas Llosa lanzó un par de interesantes reflexiones al respecto, en primer lugar sobre la posibilidad, o no, de llevar un sistema democrático a cualquier país: “Yo sí creo que la democracia se puede exportar y puede funcionar con cualquier cultura e historia, así ocurre por ejemplo en Asia en países prósperos y democráticos como Japón, Corea o Taiwan”. Sobre este mismo tema el escritor peruano pronunció una interesante frase que muchos de los presentes interpretamos como el segundo puyazo a nuestro gobierno: “La batalla por la civilización en Irak se ganaría mucho más fácilmente si todos los países occidentales lo entendieran así y prestaran su apoyo, independientemente de lo que se opinase en su día sobre la invasión, pues eso ya es un hecho inamovible del pasado y ahora hay que luchar por el futuro”.

Bromeaba Don Mario sobre la cantidad de veces que le dicen por la calle algo como “me gustan mucho sus libros pero poco sus ideas”; ayer tuve el placer de decirle que a algunos nos gustan tanto unas como los otros.

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