Un fenómeno como el de la violencia en Francia (parece que por fin remitiendo) da la los sociólogos, a los políticos y a los analistas de baratillo que somos los periodistas la ocasión para componer sesudas teorías con las que demostramos nuestra infinita capacidad de análisis.
Sin embargo, en no pocas ocasiones la realidad, o al menos una buena parte de la realidad, es muchísimo más sencilla. Sin ir más lejos, ayer encontré a través de Marginal Revolution una de las explicaciones más simples y a la vez más acertadas que he leído sobre las razones (al menos una de las razones, vaya) que explican los disturbios a los que se ha entregado alborozadamente parte de la juventud francesa.
Fue en el blog Asymmetrical Information:
Let me suggest another possibility: Muslim youth are rioting in France because breaking windows and setting cars on fire is fun.Pues va a ser que sí, especialmente cuando, como señala inteligentemente el artículo un poco más adelante, destrozar cosas no supone ningún riesgo personal para quien lo hace.
Dejen que sugiera otra posibilidad: los jóvenes musulmanes están provocando disturbios en Francia porque romper ventanas y quemar coches es divertido.
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