02 diciembre, 2005

Defender la Constitución no es inconstitucional

Mañana el Partido Popular ha convocado un acto al que voy a asistir, ya sé que muchos de ustedes, mis queridos y maliciosos lectores, pensarán que acudo porque soy más “pepero” que José María Aznar, pero eso solo es parcialmente cierto pues ni tengo carné ni es previsible que lo tenga aunque, como todos ustedes saben, en las últimas convocatorias electorales he votado sistemáticamente por este partido (sí, a Gallardón también lo voté, ahhhhrrgggg).

En cualquier caso, es ésta una convocatoria a la que acudiría si la convocase el PP, el PSOE, el Atlético de Madrid o la Federación de Calvos de Europa, si es que existe, porque lo importante no es el convocante, sino la razón por la que nos reuniremos allí (espero) muchos miles de madrileños: homenajear y defender la Constitución, a nuestra Constitución.

Cierto personaje particularmente ruin de la cúpula del PSOE decía hoy que era una concentración con un profundo sentido inconstitucional porque es un acto “en contra de una parte de España”. Obviamente este tipo (no merece tratado de señor) olvida que alguien que se manifiesta por la nuestra Carta Magna no puede estar en contra de una parte de España, porque la Constitución es de todos lo españoles.

Por otra parte, cabría preguntarse si es necesario y pertinente un acto así, en mi opinión no hay duda posible: lo es. Y no por ir en contra del proyecto de Estatuto, ni por el Plan Ibarretxe, la cosa va mucho más allá: es preciso defender una Constitución que garantiza nuestras libertades, que es válida, que ha sido y es útil y que el Gobierno, pese a que juró defenderla, está dispuesto a sacrificar con tal de mantenerse en el poder.

Estar con la Constitución no es solo estar con la Ley que ha dado a España sus mejores décadas en 300 ó 400 años, es estar con la prosperidad, es estar con las Comunidades Autónomas (con sus virtudes y sus defectos), con las garantías, con las libertades…

Yo mañana a las 12 estaré en la Puerta del Sol, por la Constitución, por la Libertad, por la España democrática y libre en la que me gusta vivir y a la que me siento orgulloso de pertenecer.

Anímese y haga usted lo mismo, nos vemos allí.

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