12 febrero, 2008

Lo que es lógico, es lógico

Según publicamos hoy en 20minutos, prácticamente todos los partidos han rechazado la propuesta electoral del PP de rebajar la edad penal de los menores. Lanzada ayer por Rajoy, la medida prometía ser polémica, ya que es un tema bastante controvertido y con una presencia recurrente en los medios.

Así ha sido y, como ya ha ocurrido con las propuestas populares sobre inmigración, el tema ha tenido una resonancia no pequeña en la prensa y ha sido descalificado de forma contundente por los demás partidos.

Sin embargo, o quizá también por esta respuesta tan extemporánea y prácticamente unánime, yo creo PP se ha apuntado dos tantos electorales de forma casi consecutiva. ¿Por qué? Pues porque se ha mostrado como el único partido del arco parlamentario que atiende a algunas demandas sociales que están en la mente de muchos votantes de todos los partidos, lo reconozcan de forma más o menos abierta.

Ya se han publicado encuestas sobre las medidas sobre inmigración e incluso la mayoría de los votantes socialistas se muestra favorable a algún tipo de regulación como la que propone vagamente el PP. Y, aunque no se trate de un resultado muy científico, los lectores de 20minutos también apoyan masivamente (un 86 % cuando escribo esto) que tipos como los asesinos de Sandra Palo paguen algo más por sus crímenes, absolutamente abominables tuviesen 15, 17 o 20 años cuando los cometieron.

Estoy convencido de que encuestas más científicas reflejarán también un notable apoyo social a este tipo de cambios.

Siempre se ha dicho que los políticos viven lejos de la realidad, de los problemas de la calle, creo que ahora esto es más cierto que nunca porque hay muchas cuestiones en las que la gente empieza a estar de vuelta de la corrección política, el buenismo y el "aquí no pasa nada". Mientras, los partidos se han quedado en las consignas tan facilonas como caducadas, olvidando que el ciudadano percibe cada vez más que una inmigración ordenada no es de derechas ni de izquierdas, sino de sentido común; o que algo hay que hacer con los asesinos despiadados de 17 años; o que, mire usted por donde, nos gusta que nos bajen los impuestos (esto ya parece que lo están entendiendo hasta en el PSOE, emocionante).

Ahora sólo falta que también a la hora de votar la gente piense más en sus verdaderos problemas y se olvide de Irak, de los obispos y, en suma, de las cortinas de humo.

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