18 abril, 2008

Criticar es machista

Por si teníamos alguna duda de a qué estamos jugando hoy nos lo han aclarado: el que critique a una ministra es poco menos que un maltratador.

Nos lo ha dicho Ángela Sanroma, a la sazón delegada del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, que ha utilizado un verbo mucho más florido para llegar a esta inefable conclusión: "Las críticas a las ministras son semillas que hacen que germine el maltrato".

Toma ya.

Hoy lo decía David Gistau en una excelente columna en El Mundo: la sola insinuación del machismo va a blindar todo lo que hagan las ministras y, por extensión, al gobierno paritario por completo. Es un truco totalmente del almendruco, como la mayor parte de los de la izquierda, pero funciona, como la mayor parte de los de la izquierda. De hecho ya están empezando las andanadas desde las baterías de la corrección política y ya se está acusando, a base de insultos, a los malvados que insultan a las pobres y desvalidas ministras.

Pero la tal Sanroma ha dado un paso más allá en la defensa del fuerte (el político, por definición) frente al débil opinante: no solo es malvado, abyecto y despreciable criticar a una ministra, sino que es poco menos que una incitación a que se pegue a las mujeres:

"La causa del maltrato está en la situación de desigualdad. Si verdaderamente somos consecuentes para erradicar el maltrato, la sociedad, las instituciones, y los políticos debemos ser intransigentes a cualquier actitud o comportamiento machista y todo lo que se está diciendo de las ministras son comportamientos machistas que una sociedad democrática no puede permitirse".

Ya ven, a solo un paso de tipìficar como delito de "inducción al terrorismo doméstico" que digamos que a Bibiana Aído, por ejemplo, le falta un hervor político como para ser ministra, por ejemplo.

Pero no se preocupen, es censura, pero es por el bien de la democracia.

PD.: Y como bien dice Gistau en la columna que les comentaba, cuando Esperanza Aguirre era sólo "Espe" y todo el mundo la trataba poco menos que de oligofrénica a nadie se le ocurría que aquello fuese machismo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mujer lista, mujer antifeminista.